Por: Isabel Andara
Social
Media/@andara12
La primera impresión es la
que cuenta. Así reza el dicho popular y esto es perfectamente aplicable en el mundo
2.0, que brinda la oportunidad a empresas y a profesionales independientes que
buscamos trabajo de mostrar nuestra
marca personal, (habilidades, gustos y productos), en redes sociales como
Facebook, Twitter o Linkedin.
Para empezar a aprovechar el
potencial de estas plataformas y promocionar efectivamente nuestra marca
personal, debemos comenzar por trabajar lo que parece más simple: seleccionar y
cuidar la calidad de las fotos de perfil que colocamos en las cuentas sociales que
nos interesa estar.
Basada en un post del
fotógrafo y Social Media Estrategist
Vicente Nadal, les diré, a manera de consejo, cuáles son los cinco tipos de
fotos cuyo uso no es recomendado si queremos causar buena impresión a quienes
se interesen en ver nuestros perfiles sociales.
Estas
pautas son:
1.- Dejar en
blanco la foto de perfil: un
dato fundamental y hasta evidente.
2.- Poner una
foto de la hace muchos años, la infancia, más delgado, joven, etc: no
hagamos esto, pues la idea es que los públicos interesados nos reconozcan.
3.- Colocar una foto de perfil esté borrosa, desenfocada, pixelada o
confusa: da mala imagen.
4.- Usar una
caricatura de un personaje ficticio o la foto de tu ídolo como perfil: denota
falta de seriedad.
5.- Poner una
foto de cuerpo entero en la que no se aprecia tu cara: puede ser muy bello
el lugar, pero no es sitio para colocar estas imágenes.
6.- Poner caras, muecas o gestos extraños:
es preferible recurrir a ellas solo cuando que te identifiquen por tu profesión.
7.- Cambiar la foto de perfil cada dos por tres: podemos llegar
marear.
8.- Tener una foto de perfil diferente en cada red social: así haremos
más difícil que los demás nos identifiquen.
¿A
ti se ocurre otra recomendación? ¡Comparte!
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